Tengo entendido que acá todos mienten. Vieja-Nueva-Reseña sobre Discutible de Babasónicos.
- Por Nancy Gregof
- 1 jul 2019
- 3 Min. de lectura

Por Nancy Gregof*
El horizonte amanece, un salvaje sacude su sangre integrada al cuadrúpedo con quien transpira, hacha en mano, calbalgando. Canta y camina un peregrino de barba mesiánica (el hombre blanco estaqueado ya pasó -la fe caducó-, ya fue "La lanza" (2013)), se mueve entre las sombras tornasoladas de un desierto iluminado por reflectores preparados para una rave en el medio de la nada. Huecos húmedos, sombras de músicos, caracoles entre yuyos de relieves brillantes, acusos, prenatales, conforman la espacialidad propuesta para el videoclip de "La pregunta" (Discutible, 2018), acaso un tipo de antiépica condicional, electrónica, porque quizás no haya más que insistir en el quién, ahora, en el desierto del acá. O no. Con este tema arranca Discutible, el duodécimo disco de estudio de Babasónicos, la llamada "banda de rock alternativo" que con 30 años de trayectoria musical y performática no dejar de recrearse y contonearse con la contemporaneidad de turno. Tal vez esa potencia erótica del desenfreno, que roza lo ridículo, sea uno de los catalizadores discutibles que atraen al cuerpo y a la escucha, porque "sé del miedo que se siente cuando estás del otro lado y no podés/ volver" (“Orfeo”, Discutible, 2018).
Así, a lo largo del disco temas como "Ingrediente" y "Trans algo" (ver video gesto) se atreven al desparpajo de lo simple, revisando sexualidades, deseos y afectividades, fórmula que la banda ha ejecutado reiteradas veces en temas como "Los calientes" (2001), "Risa" (2003) o “Puesto” (2005). En esta oportunidad, Discutible habla y suena, la electrónica y el rock transcurren sin problemas en el fluir de una lírica que desilacha lugares comunes pulsando sonidos. Este disco sabe darle a los seguidores acérrimos de la banda toques de Jessico en "Partícula”, Infame en "Bestia pequeña"o Miami en "Un pálpito", por dar algunos ejemplos, donde cardúmenes de reminiscencias musicales circulan y se aclaran en líneas como "no existe un mundo donde todos piensen/ como vos/ acostumbrate" ("Un pálpito", Discutible, 2018). "Cretino"- segundo corte de circulación comercial- condensa la baba esperada con sus bits, teclados galácticos, coros agónicos, pausas y bases rítmicas bailables, sensualmente agrias, en un disco donde proliferan los gambeteos retóricos (y respiro, gracias por no venir a decirnos cómo las cosas son, fueron o serán, gracias).
Desde "Impuesto de Fe" (2016) y "Repuesto de Fe" (2017), Babasónicos viene apostando por el disco crudo, en vivo, revisitando clásicos y desempolvando temas inéditos (como “El maestro”, por ejemplo). Más del lado de la canción melódica y suavizante, “Repuesto de Fe” ofrece juegos musicales y líricos maleables, en donde el ser (“El pupilo”, “Vampi”, “La lanza” o “Putita”, por ejemplo) es culpable sin culpa, con gracia, más ahora que escuchamos “todos mentimos a nosotros mismos/ desde que el lobo se comió al pastor” (Orfeo, Discutible, 2018). Puerta de acceso para iniciados en su musicalidad, reactualizaciones sonoras y semánticas para quienes transitamos su obra con la corriente, en “Repuesto de Fe” transamos sin guita, “Gratis”(2003), con lengua, cuerpo y ritmo, pos temblores de Romantisísmico (2013).
Discutible se corre de este estar/ser vivo recurrente, para abrir paso abanicos de interrogantes diacrónicos, incertidumbres cínicas, baladas caramelo, sin descuidar búsquedas sonoras orientadas a sacudir, imantar, lamer y partir porque "es tan fácil relajarme y confiar/ tengo entendido que acá todos mienten/ no soy todo eso que esperás de mi/ tal vez sea algo mejor/o algo peor" ("Bestia Pequeña", Discutible, 2018). Tal vez sea -sin predicado-, más allá del afán de los "teóricos del rock" (terror del crítico de rock, desde "Camarín" (2001)) y lo mejor: tal vez sea, y ni siquiera importe porque “no tengo nada/ lo dejé todo/ y lo perdido ha quedado atrás/ quiero saber quién es mi gente/ vengo a ofrecerme como su cantor” (Orfeo, Discutible, 2018). Discutible. Escuchen.
*Integrante del colectivo de escritura La Campana de la División. Escribir sobre las ruinas del rock argentino, junto con Daniel Gaguine, Daniel Talio, Carla Benisz y Emiliano Scaricaciottoli.